lunes, 3 de noviembre de 2008

Viejo.



Cuando alzo mi vista
y veo, siento; Recuerdo,
que aun en lo mas árido hay vida.
¿Será promesa de reconciliación?
Y así mismo pienso en lo mio,
tan tenue y frágil,
lejano y muerto.
yo ya no soy...
Y quizás pienso
el climax de mi era, abraza tu silencio.
La tierra trago tu yo
y con ello mi yo torrente
la sabia joven de esta carne,
aclama tu ser latente.
Dulce canto de bonanza,
de voz hueca en el silencio
Inspirada en primavera
Como luz de antaño oscuro.
Tu vida pasajera y frágil.
Melodía que fue legada
en otros tiempos y lugares de infinita soledad.
El vértigo de una altura
nublaba tu vista clara
y al caer de un día ido
acechabas la nostalgia.
Ruiseñor de un monte, sueño
Inmaculado de grandeza
cultor de añoranzas perdidas
De infante nacido en tu lecho...!*



Sergio Gabriel Olivares
(1985)