sábado, 31 de diciembre de 2011

En cuenta regresiva

En si, es complicado resumir tantas emociones y sentimientos en simples reglones, que después de un tiempo nos parecen vacíos. Es complicado explicar y hacer un balance de horas y días, los cuales poco recuerdo. Es engorroso, intentar con simples palabras que una rutina torne efecto y sea comprendida por los demás. Y ademas, es inútil superar tantas palabras, desánimos, desaires y lucen no bélicas, que confunden mi memoria. Aun así, alguien dijo una vez que para escribir, debemos hacerlo desde aquello que conocemos, y esto es lo que se: Nunca notamos el fulgor del sol en nuestros ojos, pero siempre criticamos la lluvia sobre el rostro. Confundimos fácilmente sentimientos ilusos, sobre aquellos que nos transportan a otros cielos. No notamos un abrazo venidero, una mano amiga en momentos oportunos, pero somos capaces de llorar sobre fragmentos inertes de tiempos ya pasados. No sabemos distinguir la verdad de una mentira, por miedo a conformarnos con aquello que simplemente nos hace bien. Revisamos periódicamente palabras, que en algún momento, repercutían nuestro interior. Pero sobre todo, confiamos en quienes no debemos, en quienes sin mas, destrozan la boca y el alma de otro, sin propósito alguno.

Año de contrastes y logros. Año de mentiras y luces. Año de mierda...! Pero que trajo a mi una luz, que espero siga guiando mi camino por mucho, como lo ha hecho hasta ahora y sin temor a "pisarme la cola" aseguro, eres la estrella que ilumina mi ventana en este momento, eres la brisa que me conquista en días de sol, eres la cosquilla en mi estomago al despertar, la mano que acaricia mi pelo al dormir, pero sobre todo, eres el amigo que hace mucho tiempo esperaba.

El año no fue tan malo después de todo.